El pintor José Cestero.
Freddy Medrano
Editor en jefe
SANTO DOMINGO, República Dominicana
(REPORTAJE). - Casi ciego,
taciturno y con los años acuesta, el renombrado pintor José Cestero camina por
las calles de Ciudad Nueva y la Zona Colonial, las mimas que ha plasmado con su
mano prodigiosa en sus lienzos.
En esas condiciones,
el artista plástico, que nació en 1937, solo recibe RD$900.00 como pensión del
Estado, y quien fue declarado Premio Nacional de Artes Visuales, en el 2015 por
el Ministerio de Cultura.
Cestero comenzó a pintar
desde los 14 años, y más tarde estudia pintura en la Escuela Nacional de Bellas
Artes, donde gradúa en 1954.
“Nací en Ciudad
Trujillo, que Santo Domingo del coño, eso es ahora”, disparó.
Agarrado de un
bastón, Cestero camina por la calle Arzobispo Portes, con los pasos contados
debido a la flacidez de sus piernas.
¿A usted no lo ha
llamado el ministerio de Cultura para ayudarlo a sobrevivir?, le preguntamos.
“La ayuda que me dan
es de 900 pesos, debería ser de un millón, porque yo he pintado la ciudad
entera”, respondió.
Trujillo y el arte
Insistimos en
preguntarle, si el presidente Luis Abinader sabe que devenga una pensión de 900
pesos, la respuesta fue directamente al hígado: “Él no sabe nada, si Trujillo
estuviera vivo fuera otra historia”.
Cestero confiesa que
no hay lugar de la Zona Colonial y Ciudad Nueva que no esté reflejado en sus
cuadros.
“Trujillo me protegió
y me dieron una beca”, aseguró.
El artista plástico
afirmó que ha llevado su arte a Puerto Plata, San Pedro de Macorís y Samaná.
Pidió a los jóvenes
fajarse a estudiar “para aprender todo esto del arte”.
0 Comentarios